Además de impulsar las iniciativas necesarias para elaborar la primera norma francesa sobre cisternas flexibles para la lucha contra incendios, Labaronne-Citaf lleva más de 25 años fabricando depósitos de reserva de agua para los bomberos, con la finalidad de proporcionarles un suministro hidráulico fiable y rápido para extinguir los incendios y proteger a la población y los edificios.
En Europa y en muchos otros países se está normalizando el desarrollo de puntos de agua preventiva para combatir los incendios. En virtud de él, si se produce un siniestro, los bomberos cuentan con la garantía de poder disponer de todo el volumen de agua que resulte necesario. Los bomberos tienen que poder acceder en todo momento a dicho volumen, que se debe ubicar en un único lugar para no generar maniobras adicionales a los equipos de intervención contra incendios.
Los depósitos de reserva flexibles contra incendios resultan imprescindibles en las zonas aisladas, o en sectores donde la red de agua es insuficiente. También son una medida pertinente de protección contra incendios urbana e industrial cuando se crean zonas comerciales (cisternas al efecto en zonas de acondicionamiento concertado) o zonas residenciales, en casos que van desde la ampliación de una fábrica hasta la adecuación rápida de un edificio agrícola o industrial a las normas. Los depósitos flexibles también pueden servir como almacenamiento de apoyo durante las intervenciones de las brigadas forestales de protección contra incendios.