Forraje de alfalfa
para la alimentación animalpara pradera

forraje de alfalfa
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Características

Semilla
de alfalfa
Función
para la alimentación animal
Otras características
para pradera

Descripción

Complementariedad con el maíz en la alimentación animal. Experiencia en nutrición animal Con el maíz ensilado, los forrajes desempeñan un papel esencial en la nutrición animal para los ganaderos europeos de leche y carne. La mejora de la calidad nutricional de los forrajes es un reto importante que permite optimizar económicamente las raciones LG distribuye una gama completa de cultivos forrajeros (alfalfa, ray-grass, trébol, festuca, festulolium....) para satisfacer las necesidades de composición de todas las raciones. Desde hace años, Limagrain Europa desarrolla una colaboración estratégica con la cooperativa danesa DLF, líder mundial en investigación y producción de forraje. Cada ración tiene su propia variedad Más del 80% de la alimentación del rebaño se produce en la explotación gracias al maíz y a las hierbas forrajeras. Sin embargo, en función de las necesidades del rebaño y del sistema de cría, la composición de la ración puede cambiar y es clave contar con una selección de variedades. La calidad de las variedades de maíz y forraje tendrá un impacto directo en la productividad y la rentabilidad de la ración y del rebaño. Mientras que para una ración con predominio de maíz se recomienda una variedad de maíz con alta digestibilidad de la fibra combinada con alfalfa, para una ración con predominio de forraje se podría asociar un maíz con alto contenido en almidón degradable con un ray-grass. Gracias a su completa gama de gramíneas forrajeras (alfalfa, ray-grass, festulolium...), LG puede satisfacer las necesidades de las distintas raciones en muchos países europeos (Francia, Alemania, Países Bajos, Bélgica, Reino Unido, España).

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* Los precios no incluyen impuestos, gastos de entrega ni derechos de exportación. Tampoco incluyen gastos de instalación o de puesta en marcha. Los precios se dan a título indicativo y pueden cambiar en función del país, del coste de las materias primas y de los tipos de cambio.