video corpo

Arado con vertedera SERVO 3000 series
remolcado1-10 dientescon ajuste hidráulico

arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
arado con vertedera
Añadir a mis favoritos
Añadir al comparador
 

Características

Forma
con vertedera
Movilidad
remolcado
Número de dientes
1-10 dientes
Otras características
reversible, con ajuste hidráulico
Potencia del tractor

Mín.: 80 ch
(80 hp)

Máx.: 200 ch
(200 hp)

Descripción

El SERVO 3000 se incorpora en el medio de los arados reversibles suspendidos de PÖTTINGER. El arado va ajustado a tractores de clase de rendimiento medio hasta 200 PS y destaca por el centro de ajuste simple y una gran variedad de individualización, adaptado a las necesidades. La base para el éxito El laboreo del suelo pone los cimientos de los pasos previos de trabajo para un cultivo posterior y tiene por ello una influencia decisiva en el crecimiento de la planta. Éstas necesitan un suministro óptimo de agua y nutrientes para un buen desarrollo. Un suelo mullido con una distribución de poros naturales sin compactaciones dañinas permite al cultivo un enraizamiento intensivo y profundo. El gran espacio de raíces ofrece la base para una absorción continua de nutrientes y agua en las fases de crecimiento principales. Se evita el desabastecimiento y la escasez gracias a la captación de agua y nutrientes. Las plantas de cultivo superan así mejor las situaciones de estrés. Las plantas suficientemente abastecidas son más vitales y tienen una mayor resistencia contra patogenias. El resultado es un menor gasto en fitosanitarios y aumenta el rendimiento - esto es la base para una cosecha exitosa.

VÍDEO

Catálogos

* Los precios no incluyen impuestos, gastos de entrega ni derechos de exportación. Tampoco incluyen gastos de instalación o de puesta en marcha. Los precios se dan a título indicativo y pueden cambiar en función del país, del coste de las materias primas y de los tipos de cambio.